¿Qué se entiende por gastos de representación y cuales son los más comunes?

Se entiende por gastos de representación aquellos que potencian comercialmente a la empresa ante clientes o posibles clientes y proveedores.

Los gastos de representación más comunes son las comidas de trabajo, desplazamientos y hoteles. No obstante también se consideran gastos de representación las estancias en hoteles de los clientes, invitaciones a restaurantes, regalos de empresa, entradas a espectáculos de ocio o deportivos, inscripciones en jornadas, conferencias y cursos, entre otros.

¿Qué requisitos deben cumplir para que sean deducibles?

Los gastos de representación deducibles son aquellos que se consideran necesarios para la actividad de la empresa, es decir que sean susceptibles de generar ingresos a la misma, además Hacienda establece que para que sean deducibles se han de cumplir ciertos requisitos:

• Disponer de factura, que ha de cumplir con una serie de requisitos formales o el justificante correspondiente.
• Debe estar contabilizado en la cuenta de pérdidas y ganancias del ejercicio.

¿Existe algún límite para la deducción de los gastos de representación?

La Ley establece que el importe anual máximo destinado a los gastos de representación deducibles no puede ser superior al 1% del importe neto de la cifra de negocios en ese mismo período impositivo.

¿Es posible deducir el IVA de los gastos de representación?

La norma del IVA es poco flexible por lo que el primer requisito para poder recuperar el impuesto de los gastos de representación es disponer de la factura completa en la que entre otros requisitos se desglose la base imponible, el tipo de IVA aplicado y el importe del IVA, por ello no es suficiente ni una factura simplificada ni un ticket para poder deducir el IVA soportado, no obstante, es posible obtener una factura de canje de tickets que te permitirá deducir el IVA. Además, los conceptos deben estar vinculados a la actividad económica desarrollada por la empresa.

¿Todo lo anterior es de aplicación a los autónomos?

En cuanto al IRPF, los profesionales autónomos que declaran el IRPF por el régimen de estimación directa pueden desgravar lo mismo que las empresas en el Impuesto de Sociedades, los autónomos que se rigen por módulos no pueden porque pagan una cuota fija.